Si bien puedes sentirte motivado a entrenar tus abdominales para que estén tonificados y con poca grasa, estas prácticas no son la forma correcta de mejorar esta zona.
Recuerda que el entrenamiento de fuerza no solo aumenta tu fuerza muscular sino también el tamaño de tus músculos. Cuanto más entrenes tus músculos abdominales, más grandes serán. En realidad, estás agregando tamaño a tu cintura, pero no estás quitando la grasa del vientre. La grasa del vientre disminuye cuando reduces la ingesta de calorías y gastas más energía de la que ingieres. Es decir, creas un déficit calórico.
Tu cuerpo no activa automáticamente un mecanismo para quemar grasa en ciertas regiones cuando comienzas a entrenar ciertos músculos. Quemar grasa es parte de tu proceso metabólico general, y para las mujeres, a menudo comienza de arriba hacia abajo.
Por lo tanto, es probable que tu pancita sea una de las primeras regiones de tu cuerpo en bajar grasa, pero no sucederá haciendo ejercicios abdominales en exceso.
Este mito de "reducción en zonas específicas" ha sido desmentido en investigaciones. No puedes entrenar una determinada parte del cuerpo y esperar que aceleres la pérdida de grasa en esa región en particular.
Así que deja de buscar marcar tus abdominales sólo entrenando en el gimnasio, y comienza con lo que comes en la cocina.
Consejo del Coach
